Entrevista
Tomado de Semanario Voz
Por Carolina Tejada
Son diversos los incumplimientos del Gobierno en el proceso de implementación, uno de ellos, con los prisioneros indultados
Jaime Alberto Parra Rodríguez, es el nombre real de “Mauricio Jaramillo”, uno de los más importantes dirigentes del secretariado de las FARC-EP. Este hombre, que se vinculó a la insurgencia siendo médico y especialista en dermatología, había iniciado su vida política como militante en la Juventud Comunista, según él, porque era la época en la que ganaba Julio César Turbay la presidencia, y se vivía un momento de persecución con el “estatuto de seguridad”, entonces, era el monte o la muerte.
En este momento, ente otras responsabilidades, tiene a su cargo dos tareas que asumió en el marco del proceso de paz. Una de ellas, sacar adelante, según lo acordado, una de las 26 zonas en donde se han concentrado los diferentes frentes guerrilleros, esa zona es la de Colinas, en el departamento de Guaviare. La otra tarea es la de velar por el proceso de los indultados. Son 2.736, integrantes de las FARC en prisión, y hasta ahora, lo pactado en relación al indulto no se ha cumplido a cabalidad.
No existe voluntad con la libertad de los indultados
Queriendo conocer las impresiones e inquietudes que tienen las FARC sobre este tortuoso trámite, el cual se esperaba avanzara gracias a la ley, la 1820 de 2016, con la cual se esperaba que para el 30 de diciembre de ese año, los indultados lograran su libertad, cosa que no ha sido así, VOZ dialogó con Mauricio, quien contó sus opiniones al respecto.
“Este ha sido un proceso bastante complicado. Hay unos acuerdos y esos acuerdos no se han cumplido. De parte del Gobierno hay una intención de no cumplirlos”. Afirma que eso quedó en evidencia en una reunión que sostuvieron en la Csivi, en presencia de Mónica Cifuentes, quien es la que ha llevado todo este proceso. Sin embargo, para este jefe guerrillero, las cosas no han sido sencillas. “Ha habido todos los requerimientos que se han necesitado por parte de nuestros abogados, ellos han puesto de presente que todo tiene que haberse cumplido y se ha cumplido por parte nuestra. La cantidad de excarcelaciones que debía haber en este momento, deberían ser todas, no se debía esperar otro proceso, era firmar y salir, el Gobierno no lo cumplió”.
El equipo jurídico
El equipo jurídico que acompaña el proceso le ha tocado también sortear, incluso, señalamientos por parte del mismo Gobierno, comenta que incluso “nos habían querido imponer unos abogados de oficio, porque los nuestros supuestamente no habían cumplido. Toda esta serie de cosas son muy complejas. ¿Por qué se dicen y para qué se dicen estas cosas? Primero para entorpecer y segundo para intentar crearnos problemas internos. Pero, claramente hemos explicado y dejamos expreso, que no es verdad que no estemos cumpliendo, la gente nuestra también entra en una etapa, de preguntarse por qué no se están cumpliendo los acuerdos alcanzados en La Habana y quieren respuestas”.
No, nos van a desesperar
Han pasado seis meses a la espera de la libertad de todas las personas indultadas, los malos tratos y la atención para los enfermos, tampoco se resuelve. “Los nuestros han salido, y juiciosamente se han vinculado a las zonas, trabajando con los guerrilleros que están ahí, y tratando de culminar los trabajos que hay en cada lugar. Hace unos días llegó a nuestra zona un grupo de compañeros recién salidos de la cárcel, y nos propusimos hacer un plan, para también actuar en función de que el Gobierno cumpla ya. Ese es el deseo que los compañeros que ya han salido, sentar su voz por los que no han salido aún”.
Comenta que en Mesetas hay un grupo de guerrilleros que han salido, pero están pendientes de algunas soluciones jurídicas, mientras tanto siguen adelante con la ejecución de otros compromisos que les ayudará a proyectar el futuro, pero sigue siendo complejo, según afirma el insurgente, por el incumplimiento con lo pactado. “Tenemos la necesidad de que en las zonas haya seguridad alimentaria, en muchas partes no ha habido esa posibilidad, porque no nos han brindado los medios, porque no hay tierras, no hay posibilidades de que ellos empiecen a producir porque no hay como, entonces las dificultades son muchas y provienen del Gobierno”.
Con el proceso de implementación, toda la guerrillerada fue vinculada al sistema de salud que existe en el país, según menciona Mauricio, ha sido otro elemento que les ha costado mucho asimilar. “Cuando funcionaba el mecanismo nuestro de salud, en todo el país, éramos muy eficientes, le dábamos atención médica a nuestra gente interna y externamente. Internamente teníamos un grupo de enfermeros bastante prestantes, en el sentido de que podían hacer muchas cosas y lo que no podían, pues lo hacíamos por fuera. Ahora, nos han vinculado a todos en unas EPS, que realmente no funcionan, mejor dicho, entramos a la ley 100, que es inmovilidad total”
En ese mismo sentido habla de los altos niveles de corrupción y lamenta que esta sea la realidad que día a día les toca vivir a todas las familias colombianas. “Uno levanta un poquito la cara y se da cuenta que la corrupción es total. Este país está carcomido por la corrupción, que no deja que nada funcione. Necesitamos que muchos compañeros sean atendidos y no es posible, hay muchas barreras. Estamos llamando a todo el país a que hagamos un frente común contra la corrupción. Con la salud, todo es un proceso de mentiras y la gente no tiene soluciones. Así que nuestros compañeros que están saliendo de la prisión, entienden cómo es esto, porque lo han vivido en carne propia”.
La realidad demanda de la unidad y lucha
Para Mauricio, esta realidad es la que hace que los miles de guerrilleros y guerrilleras, que hoy se reincorporan a la vida civil, se entusiasmen con la continuidad de sus objetivos y por eso reitera: “Como las cosas no han cambiado nada, pues nosotros seguimos en la lucha, en la lucha política. Y hacemos la invitación al pueblo colombiano a que luchemos por nuestros derechos, los que no hemos alcanzado en todo este tiempo. Los objetivos nuestros desde 1964, inclusive desde 1930 con la fundación de nuestro partido, persisten, inclusive se amplían, las bandereas no se caen. Por eso creemos que debemos seguir en la pelea”.
Desde su análisis y con entusiasmo, cuenta que existe en la gente la expectativa, de lo que el nuevo partido le va a proponer al país, lo que van a plantear y decir, y asegura que, “estamos atentos a un gran frente común para la lucha contra toda esta situación, la gente también nos invita a nosotros, y estamos de acuerdo, en que no debe haber imposiciones de nadie, porque queremos es realmente una fuerza, lo suficientemente fuerte para empezar a acabar con tanta inequidad en este país”, afirma Mauricio haciendo hincapié en que existe una pasividad desde la comunidad internacional, frente a lo que ha venido pasando con lo acordado, asegura que su actuar debería ser mayor.
Ratifica que, mientras tanto, “Hay que buscar una salida a este problema, es la paz, pero el sector que se opone no quiere la paz y no quiere decir la verdad, les aterra y son un palo en la rueda. Quieren crear como un espacio vacío, y nosotros decimos es terrible que acontezca eso, ese muro se tiene que derribar y es con la verdad”.
Comentarios
Publicar un comentario
Este es un espacio para la sana exposición de las ideas. La paz se hace con un diálogo fundamentado en la descencia y el respeto. Por favor omitir groserias y vulgaridades.