Análisis Tomado de Café Stereo Por Alberto Pinzón Sánchez Al iniciarse el mes de junio del 2017, el llamado proceso de paz de Colombia ha entrado a depender de cinco variables que lo llenan de una total incertidumbre: tres de ellos internas; 1- Las dificultades oficiales en la implementación del Acuerdo de la Habana y el limitado avance del proceso de paz con el ELN. 2 -La persistencia y auge del narco-paramilitarismo colombiano y el exterminio, gota a gota, de dirigentes sociales populares. 3- Las elecciones presidenciales del 2018. Y dos externas; 4- La reactivación de la agenda de la Drug War del gobierno Trump, y 5- La vidriosa situación en Venezuela. Es decir que, dicho proceso social en lugar de avanzar hacia una estabilidad, la dinámica contradictoria en él contenida lo ha ido llevando hacia una incertidumbre mayor, a un desarrollo cada vez más complejo, más impredecible, o talvez, más violento. El telón de fondo de tal escenario tiene como todo fenómeno
La voz de los oprimidos