Análisis Por Gabriel Ángel Hasta el día de hoy nadie puede demostrar que tiene toda la razón en cuestiones de revolución y socialismo. Los pueblos indagan y construyen verdades y hay que respetarlos. Octubre de 2017 llega a nosotros con un doble impulso político y moral. El cincuenta aniversario de la muerte de Che no puede pasar desapercibido para ninguno, en la medida que encierra una significación verdaderamente histórica. Pero como si fuera poco, a tal conmemoración se agrega la del centenario de la revolución rusa, el más grande experimento humano en busca de la justicia. La coincidencia abriga mucho más que una simple concurrencia de fechas. Del anecdotario de la revolución cubana se extrae la escena de Fidel preguntando a la dirigencia insurreccional victoriosa, si había dentro de ellos algún economista para ponerlo al frente del Banco Nacional, resultando el conjunto sorprendido cuando el Che se señaló a sí mismo como el indicado. Dicen que
La voz de los oprimidos